dilluns, 22 d’agost del 2011

SIEMPRE ES LA PALABRA QUIEN APRIETA EL GATILLO

Imagen propiedad de Marian Raméntol



Me regaló todas sus palabras
para que  el olvido
almacenase geranios
en la trastienda de su boca.

Entendí entonces que siempre es la palabra
quien aprieta el gatillo,
armada de miedos y tormentas,
pronunciando secretos y eternidades.
Comprendí a los interrogantes
cuando llaman la atención del aire
para que narre los ojos repetidos
que se anclan a la tarde,
con las alas del mundo dilatadas
hasta tocar las costillas de un cielo
fecundado, sin más límite que el puro
movimiento hacia el perdón de la llama,
hacia el ruido de la noche
encendida, hacia el milagro del verbo
cuando se descalza.

Y los geranios crecieron ajenos
a la tragedia de haber perdido el nombre.

Marian Raméntol
-------------------------------------------------------------------------
Poema perteneciente al poemario Pancartas incendiarias en mi pecho, galardonado con un accésit en la vigésimo séptima edición del Concurso de Poesía Ciudad de Zaragoza.

6 comentaris:

Albert Lázaro-Tinaut ha dit...

Marian, me encanta que humanices la palabra con ese "quien" tan elocuente. A veces las palabras resultan más humanas que los bípedos, y así se manifiestan en ese hermoso poema. ¡Cómo me gustaría ungir de humanidad, como tú haces, las palabras que utilizo en este comentario!
De paso, enhorabuena una vez más por tus traducciones al rumano.
Besos.

Sarco Lange ha dit...

Hermana, ts geranios y tus palabras tienen la cuna en lo más alto de nuestros delirios, germinan de una manera casi sobrenarural. Y eso siempre se agradece.

Besotes.

Amando Carabias ha dit...

Ahí está, somos palabra, verbo que se desnuda al paso de cada minuto.
Bravo

Glòria Recarey ha dit...

Mi Lady...los geranios siguen creciendo a la vez que se engrandece tu poesía.
Felicidades mi niña.

Sergio De Simone ha dit...

Marian, es precioso!! me gusta mucho la levedad del poema, enhebrado con esa amorosa música.
Muchas Gracias!

Lucas Fulgi ha dit...

Me gusta el poema, aunque la imágen del título tenga para mí una connotación negativa. Pero en la trama de tu poema, tan narrativo por momentos, y con imágenes tan fuertes, está genial.

Saludos