divendres, 30 de maig del 2008

TODO LO QUE NECESITO PERTENECE A MI LADO IMPERFECTO



La ventana me mira de manera impropia.
Insiste en regalarme un recital de indefinidos verdes
cuando yo, en realidad, no le he pedido nada.

La cara oscura de la ausencia tiene ritmo,
como lo tienen aquellas flores
que ya no son capaces
de controlar a sus caderas
y que sin pretender ser concubinas de la luna,
amamantan cada noche
el segundo sexo de los estanques.

Todo lo que necesito
pertenece a mi lado imperfecto.
La arruga,
haciendo de proxeneta entre los párpados
y la voz de mis pulmones,
mientras espero que el resto
sea tan sólo la mentira
con la que vestir de gala
la sombra que alimenta los huesos.

Mi respiración nunca ha temido al estruendo
de un millón de cristales rotos,
y gracias a Dios, hoy ha confesado.

2 comentaris:

Sergio ha dit...

REALMENTE HERMOSO ESTE POEMA. LA PALABRA IMPERFECCIÓN VISTA DESDE OTRO ÁNGULO. EN LA FRASE "Mi respiración nunca ha temido al estruendo
de un millón de cristales rotos,
y gracias a Dios, hoy ha confesado." ¿TE REFIERES A QUE ROMPISTE LA ALEGÓRICA VENTANA?

Alexander Páez ha dit...

He caido aqui por casualidad y me han encantado tus poemas! Son geniales! Creo que voy a investigar más por aqui!

Si te gustan los relatos pasate por mi blog, aunque tengo muchos en catalan, estoy empezando a traducirlos! Un saludo!