dimarts, 11 de novembre del 2008

CADA RINCÓN DEVUELVE SIEMPRE LA MIRADA



Después
se oculta tu plumaje
-de nuevo-
entre las grises nubes
de un cielo que no pacta
con sus hijos.

Sagrario Hernández



He descubierto una mirada amarilla
entre las hojas de un libro frágil,
que hablaba muy bajito sobre el vapor de las cosas,
el gesto del vuelo cuando ríe,
el delgado horizonte de la sombra
con la que trenzan pentagramas los pájaros rotos,
y los abriles a pie de página, que se suceden
como una tragedia de brisa y encrucijada.

Debió dejarla allí un ojo envuelto en plástico
que no supo ver el crimen, la lágrima que nos llueve,
la soledad en la que nos escribimos,
la caricia en ropa interior, que dibuja sólo
el naufragio de dos manos asustadas.

Debió olvidarla allí el beso desalquilado de la muerte,
que no reconoció
la sílaba de la arena, ni mi nombre
desleído con ternura, ni el labio de la hoja
prominente en el último disparo.

Pero cada rincón, devuelve siempre la mirada,
ajusta los espacios de luz indefensa
y acaba siempre revelando la fría superficie.

8 comentaris:

Anònim ha dit...

Siempre nos quedará la oscuridad.

Isabel Huete ha dit...

Desde hoy mismo te pongo en mi roll de blogs. Llevo queriéndolo hacer desde hace tiempo y siempre se me escapa por algún lado la neurona :)
Ese poema deduzco que es tuyo y me parece enorme, precioso.
Un beso grande.

Mamen Alegre ha dit...

Hay miradas que se nos quedan cercanas sólo para recordarnos que están ahí, al lado del frío.
Las que se quedan para siempre acaban reconociendo nuestros nombres desleídos con ternura, y se templan, es cuestión de tiempo.

Besos, besos.

Luisa Arellano ha dit...

Tú has descubierto una mirada amarilla y yo hace tiempo descubrí tu extraordinaria sensibilidad. El poema me eriza la piel.

¡Qué lindo!

Marian Raméntol ha dit...

Y muchas otras cosas, tú y yo tnemos el don de hacer de la respiración toda una aventura.

Muicks!
M

Marian Raméntol ha dit...

Isabel! alegría inmensa verte aquí!!
Bienvenida a mi casa, artistaza!

Un beso
M.

Marian Raméntol ha dit...

Así es Mamen, y son tan lentas a veces...

Besos, más besos

M.

Marian Raméntol ha dit...

Hola Luisita, gracias por tu entusiasmo cielo, eres todo un regalo.

Besitos
Tu nieto está preciooooooooooso

MArian