divendres, 31 d’octubre del 2008

DESDE LA EXPRESIVIDAD DE LA NADA




Las urgencias se callan,
de puntillas tras el dolor del cuerpo,
y las marionetas aprenden a nadar, sobre el salitre
de un océano conjugado en mañana.
El aliento, flaco, deambula
por la cautela del instinto,
y yo, tan cuidadosamente como puedo, muero
en este mar de sangres y timones,
de orillas repletas de lagartos de trapo.

Pesan tanto mis gestos
que sin querer amenazo de muerte
a la piel de la sorpresa.

Pesan desde la expresividad de la nada
con todos mis muertos colgados del pecho,
tejiendo sus redes de hambre, bajo la locura
de un horizonte de tejas y suspiros
sin dimensiones que puedan precipitar el éxodo.

Ha vuelto a ocurrir, la vida ha muerto otra vez
mientras yo le daba el tiro de gracia
a las esquinas del último verbo.
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Poema Publicado en Asociación Cultural Myrtos Gramma Al manar. (octubre 2008)





Poema traducido al rumano y al inglés, publicado en la revista Orizont Literar. CONTEMPORARY HORIZON MAGAZINE - ISSUE NO. 1/JANUARY-FEBRUARY 2010.
Traducător: Ana Fărnoagă
Corector: Cristina Costin


Poema incluido en una selección más ámplia de poemas de mi autoría traducidos al italiano y publicados en la revista semenstral especializada La Clessidra, nº 1/2010, Joker Edizioni. Septiembre 2010.

6 comentaris:

GEORGIA ha dit...

Que manera!!!!!! que manera de decir, me envician tus letras, debo volver a ellas una y otra vez, se quedan en mi cabeza como un espiral

un abrazo...de puntillas

Marian Raméntol ha dit...

Un abrazo de puntillas? eso jamás, el abrazo bien alto, que sienta orgullo de nosotras, y yo añado un beso, por tu generosidad y por tu entusiasmo.

Miles de gracias, georgia.

Sarco Lange ha dit...

Pero tú no morirás, Lady Vida, porque los bosques no suelen fallecer.

Marian Raméntol ha dit...

Mientras hayan miradas que me salven, no, no moriré todavía.

Mil besos en Fa.

Anònim ha dit...

Veo a los lagartos de trapo correteando entre nuestros pies. Y veo a los muertos que cuelgan de tu pecho, como buscan amamantarse de nuestro éxodo.
Los veo porque tú quieres.
Un petó!

Marian Raméntol ha dit...

La puerta de mi infierno siempre ha estado abierta para ti, Cesc, desde el principio de los principios, cuando ni siquiera yo sabía de su existencia, por eso siempre ves y verás cada uno de mis códigos latiendo o muriendo...

Tuya
MArian